Las muertas de Juarez

La impunidad continúa

miércoles, septiembre 23, 2009

Columna publicada en Norte de Ciudad Juárez
www.nortedeciudadjuarez.com

Balcón

• El aplazamiento a Chávez Chávez en PGR…por unos votos
• Cara a cara, Felipe Calderón con las muertas de Juárez•
¿Fernando Baeza y los senadores chihuahuenses votaránpor la impunidad?

Don Mirone

La visión es corta y la memoria mucho más. Sólo recuerdos quedan del Felipe Calderón respetadamente doctrinario cuya claridad entre el pensar como panista y el hacer como panista le ganó admiración de los suyos y el respaldo suficiente para llegar hasta la candidatura a Presidente de la República, a contrapelo de la línea presidencial marcada por la familia Sahagún-Fox y su corriente operadora aliada el Yunque.
Hoy el Presidente es la antítesis de aquel Felipe Calderón. Han bastado sólo tres años para cuajar una férrea conducta pragmática, disonante por completo entre los postulados partidarios gomezmorinianos que le daban fondo y forma a su fisonomía como político y sus acciones en el poder público abiertamente contrarias a aquel dictado humanista.
Caída por completo la vieja piel de demócrata, Calderón no tuvo empacho ni escrúpulo alguno para imponer candidatos del PAN a gobernador a lo largo y ancho del territorio nacional. Quitó presidente e impuso presidente en su partido. Se acomodó en la Cámara de Senadores una coordinación parlamentaria ad hoc, perfectamente hormada para seguir instrucciones sin hacer gestos ni las pataletas idealistas que se permitía Santiago Creel en ese cargo.
De tanta crítica y sistemáticos cuestionamientos durante décadas, Felipe Calderón ha terminado cruelmente atrapado en el raído ropaje del viejo PRI contra el que lanzaba sus calcinantes arengas y se ha transformado en un personaje al más clásico estilo del viejo tricolor, con la agravante de que el PRI llegó a la “feliz senectud” en el poder y Calderón fue derrotado en un chasquido de dedos. Si le concedemos al Presidente la continuación transexenal del PAN desde el 2000, son nueve años, pero si hablamos exclusivamente de la era Calderón son apenas 36 míseros meses que tuvieron su punto culminante en la catastrófica jornada electoral del 5 de julio que dejó pavimentado el camino los priístas para regresar por la puerta grande. En estos instantes no se ve por dónde ni cómo el Presidente pueda entregar en el 2012 la estafeta a uno de los suyos.
Sólo bien analizado ese contexto nos ofrece luz sobre las motivaciones que ha tenido el señor Presidente para proponer que sea nombrado como procurador general de la República (PGR), Arturo Chávez Chávez, cuya “solvencia” partidaria se remonta a la década de los 90 en el PAN chihuahuense cuando fue pillado cometiendo fraude electoral interno para ser favorecido con un asiento en el Consejo Nacional blanquiazul (públicamente documentado) y cuyo paso por distintas áreas de procuración de justicia en Chihuahua obtuvo no sólo la reprobación generalizada, sino también sendas recomendaciones de organizaciones derechohumanistas para ser sancionado por su responsabilidad “personal y directa” al dejar impunes más de 100 homicidios de mujeres en Juárez. Mucho peor aún, la Comisión Nacional de Derechos Humanos concluyó en sus investigaciones que Chávez Chávez fabricó culpables, o chivos expiatorios, para salir al paso de su ineptitud en las indagatorias de muchos crímenes.
Alguien que debió ser indiciadoUn ejemplo nada más de una lista muy nutrida; el expediente número 12300/96-1104, correspondiente al caso de Silvia Rivera Salas. Narra la CNDH:“En el presente caso se inhumó el cadáver de una mujer únicamente con la identificación por parte de dos testigos, de los cuales uno señaló que no reconocía la ropa y el otro indicó que presentaba similitudes, sin que se presentaran pruebas periciales…”.“Posteriormente, la supuesta víctima (a quien aparentemente pertenecía el cadáver sepultado), se presentó ante la representación social para manifestar que no había fallecido y que vivía con su novio, por lo que se ordenó la exhumación del cuerpo. En virtud de lo anterior, se realizaron diversas investigaciones, desprendiéndose que el cuerpo que en principio había sido enterrado pertenecía al de otra mujer que se encontraba desaparecida y que había sido asesinada por su pareja”.
“Es importante precisar que en el certificado de necropsia se estableció que la víctima sepultada contaba con una edad aproximada entre los 15 y 17 años de edad, siendo que en realidad tenía 21 años, según dicho de los padres. LA INDAGATORIA FUE CONSIGNADA EL DIA 10 DE JULIO DE 1996 CON DOS DETENIDOS”.
En ese caso y decenas más profesionalmente bien sustentados, la Comisión Nacional de Derechos Humanos emitió la recomendación número 044/1998 dirigida al entonces gobernador, Francisco Barrio Terrazas. El dictamen concluye que los visitadores de la CNDH lograron acreditar actos violatorios a los derechos humanos de la mujeres victimadas y de sus familiares, y se infringieron las normas legales e instrumentos internacionales en perjuicio de las agraviadas.Ese tremendo desorden derivó en la famosa recomendación nunca atendida por Francisco Barrio ni por los gobernadores subsecuentes, Patricio Martínez y José Reyes Baeza:“Esta comisión considera necesario que se abra una investigación con objeto de determinar las responsabilidades administrativas y/o penales en que pudieron haber incurrido el licenciado Arturo Chávez Chávez, procurador general de Justicia en el estado de Chihuahua y funcionarios de la Subprocuraduría zona norte con sede en Juárez…”.
“En cuanto al procurador general de Justicia es menester precisar que es responsable directo y personal ya que, entre sus múltiples atribuciones se encuentra la de vigilar la observancia de los principios de constitucionalidad y legalidad en el ámbito de su competencia; independientemente de que es el servidor público que se encuentra al frente de la dependencia en referencia, y por ello, tiene a su cargo la actuación del Ministerio Público”.
Si clasificamos los pecados de Chávez Chávez al frente de la Procuraduría del Estado, y aún al frente de la delegación estatal de la Procuraduría General de la República (PGR), podemos estar de acuerdo que los señalados por la Comisión Nacional de Derechos Humanos, al que se sumaron la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y centenas de organizaciones similares por todo el mundo, son los pecados mayores, pero el ex funcionario carga otros antecedentes de múltiples “levantones” de personas que luego aparecieron muertas, de complacencias (¿complicidades?) con bandas de asaltantes de bancos y una demostración plena de que su perfil carece de actitud y aptitud para desempeñar tareas como las que eventualmente llevaría a cabo en la PGR. Su propuesta es una aberración en medio de la crisis de inseguridad sin precedentes que vive nuestro y en medio del desmantelamiento que sufre la propia PGR.
En una entrevista concedida al periódico Reforma (publicada el 10 de septiembre de este año), Mireille Roccatti, quien presidiera la CNDH cuando Chávez Chávez era procurador de Justicia, sin lugar a dudas dijo que el ex funcionario “cometió graves omisiones e incurrió en negligencia que evitó que se esclarecieran los asesinatos de mujeres en Ciudad Juárez”.
La respuesta a los cuestionamientos generalizados contra la nominación de Chávez (única, por cierto) fue dada con la misma intensidad, pero a favor, el pasado 16 de septiembre por el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont. Dijo que el Gobierno federal no ha rectificado ni cambiará su posición para mantener esa propuesta al cargo de procurador.
“Don Arturo está dispuesto a dejar el confort para servir al país, ya que a él no se le pueden pasar todas las facturas o errores de instituciones donde se ha desempeñado. Debe ser tratado con justicia”, expresó el funcionario, para asombro de todo mundo.
¿Y la justicia a los cientos de mujeres muertas… y a sus hijos, y a sus padres…y a la sociedad?. Y la justicia oficialmente solicitada por la CNDH contra Chávez Chávez, que en aquellos momentos representaba a una institución y por tanto estaba a cargo de la misma?.Es desafortunada la respuesta de Gómez Mont e indudablemente estuvo dicho funcionario consciente de ello al momento de hacer esa declaración porque es un hombre muy lúcido pero funcionarios de su tipo saben que las instrucciones se acatan como se reciben y punto. Si el candidato a procurador fuera “Juanito”, Gómez Mont se encargaría hasta de extenderle credenciales como panista de viejo cuño. De ese tamaño andan las cosas en el equipo calderonista.
La falta de certeza al PAN para alcanzar la mayoría de los votos en el Senado de la República y así convertir a Chávez en procurador hizo que la sesión correspondiente programada para la semana anterior fuera aplazada para los siguientes días. De 128 votos que tiene el órgano legislativo, el PAN sólo tendría asegurados sus votos (52), seis del Verde Ecologista, algún priísta que se ha dicho sería el chihuahuense Fernando Baeza Meléndez y alguno de los dos llamados “sin partido” (PANAL). Con todo ello le seguirían faltando cinco sufragios los 65 necesarios, si acuden los 128 senadores a la sesión correspondiente.
El PRI no ha respondido categóricamente que no votará en contra ni a favor. Extraoficialmente se ha sabido que sus senadores se abstendrán (menos uno, o una), con lo cual permanecen en el juego perverso de la hipocresía que, por una parte se lamentan y se suman en apariencia a las voces que exigen justicia por las muertas de Juárez pero por la otra no se deslindan con la claridad necesaria respecto de quien fue artífices de la impunidad todavía imperante en centenas de aquellos homicidios y cuya negligencia e ineptitud sólo fue comparable con la administración estatal que siguió a la de Barrio.¿Por qué a fuerzas debe ser Chávez?
No está claro todavía si el gobierno de Calderón por lo menos tuvo la atención de informar al Senado sobre la propuesta que enviaría para nombrar a Chávez procurador general de la República. Se ha dicho que no, lo cual nos habla de dos hipótesis:La primera es que el titular del Ejecutivo federal continúa con el piso perdido y creee que puede manejar discrecionalmente nombramientos y acciones de gobierno en general como si el servicio público fuera privado.
Y la segunda es que fue parcialmente informado sobre los antecedentes de Chávez Chávez que, estrictamente hablando, no es elegible para ése ni para ningún otro cargo público, mientras no sean cumplidas las recomendaciones de las organizaciones derechohumanistas… que no prescriben.
La segunda hipótesis es altamente probable porque el ex procurador de justicia pertenece a dos burbujas muy influyentes, la de Diego Fernández de Cevallos, Antonio Lozano Gracia y el propio Gómez Mont, y a la de Luis Felipe Bravo Mena y César Nava, identificados como miembros del Yunque. Las huellas de la relación de Chávez Chávez con esta última organización ultraderechista aparecen desde finales de los ochenta precisamente en la ciudad de Chihuahua.
Dicho por boca de Gómez Mont, la decisión tomada por el Presidente ya no tiene reversa aunque haya sido esclarecido el negro historial del posible nuevo procurador, aunque haya sido exhibida su inaceptable mediocridad en el servicio público y aunque las voces elevadas en contra de su nombramiento a nivel nacional e internacional sean prácticamente unánimes.
Contra la falta de lógica e intereses personales y de facción insospechados no vale razonamiento de ninguna especie. El Presidente es el Presidente. Por sus pistolas ha decidido que Chávez Chávez sea procurador general de la República y en esa posición se mantendrá aunque atente contra la ley, contra su trayectoria partidista antes del 2006 y aunque los resultados negativos presentes en las urnas le anuncien un futuro inmediato de peores tribulaciones a él, y de pasadita a su partido, Acción Nacional.
Ojalá reflexionara -a tiempo- en que las equivocaciones forman parte de la naturaleza humana. No resta más que apelar a ello y esperar, de la misma forma, que los legisladores Gustavo Madero, Ramón Galindo, Teresa Ortuño y Fernando Baeza, recuerden que son senadores representantes del estado de Chihuahua y no únicamente miembros del PAN y del PRI, respectivamente.